El progreso de la IA en todos los campos laborales es una evidencia, aunque todavía no seamos plenamente consciente de ello. Cada día recibimos noticias de prometedores proyectos en donde las redes neuronales ofrecen nuevas aplicaciones.
Hoy vamos a hablar de una profesión que todo apunta a estar cada vez más en peligro: el periodista. Y no, esta vez no hablamos de los riesgos a los que muchos cronistas se encaran diariamente debido a que desempeñan sus funciones en territorios castigados por la guerra o bien por la extrema violencia. Nos referimos a los avances que se están generando en la robótica y en la Inteligencia Artificial.
Los robots hacen de periodistas
Tiempo atrás pudimos observar con asombro como “China Xinhua News”, un canal de noticias referente en China, fue presentado por un robot humanoide creado por una compañía de Inglaterra en colaboración con Sogou, el motor de búsqueda líder en Asia.
La perfección de su apariencia y la cuidada voz con la que este robot dirigió el telediario había sido desarrollada tomando como referencia a Zhang Zhao, un prestigioso presentador de dicha cadena televisiva. El pasmoso parecido, la forma en la que pestañeaba y la naturalidad con la que hablaba al presentar el telediario, son solamente un ápice de lo que el avance de las nuevas tecnologías va a ofrecernos en el futuro.
¿Es creativa la IA?
Indudablemente es una contestación que cada vez permite tener menos dudas. Sí, los robots son capaces de crear. Solamente precisan ser entrenados, de igual forma que nos pasa a los humanos.
Un caso de la capacidad de creación que posee un algoritmo es una novela japonesa que ha sido redactada por un robot y que tiene por nombre “El día que una computadora escribe una novela”.
Esta obra llevada a cabo desde la Future University Hakodate en Japón, fue presentado con enorme éxito a un concurso literario llamado Nikkei Hoshi Shinichi que organiza el periódico Niho Keizai Shinbun, en el que llegó a pasar la primera ronda del concurso. Aunque no venció, la obra alcanzó la final, aunque sorprende todavía más saber que no fue la única presentada, en tanto que en conjunto fueron once las obras presentadas al concurso creadas por aplicaciones controlados por Inteligencia Artificial.
A continuación, os presentamos otro proyecto que como poco, ha llamado la atención del mundo literario. Se trata de un algoritmo desarrollado por Karmel Allison, una bioinformática de la Universidad de California, aficionada a la literatura. Con él, ha conseguido entrenar un sistema de Inteligencia Artificial que tiene un aprendizaje automático con el que genera artículos y es capaz de escribir poesía y prosa, alcanzando así un grado de creatividad relevante.
Los algoritmos que ha entrenado se han enriquecido gracias a obras literarias de escritores como J.K. Rowling, Haruki Murakami, Tolstói y Jane Austen entre otros muchos. Estas obras literarias son expuestas en CuratedIA, una revista redactada prácticamente en su totalidad por el algoritmo que ha desarrollado, y que tiene como lema “Una revista literaria escrita por máquinas, para personas”.
A pesar del nivel que ha alcanzado el sistema de Redes Neuronales, en algunas ocasiones necesita que las obras sean revisadas por humanos para corregir la acentuación. En otras ocasiones, las obras son escritas a medias entre personas y el sistema de IA, como puede ser un poema denominado “Ophelia”.
Por el momento estos trabajos requieren de cierta supervisión humana, pero más pronto que tarde dejará de ser preciso, y vamos a estar ahí para contároslo.